18 April, 2018

Pueblos

Vidángoz y las Cuevas de Azanzorea

Vidángoz, el pueblo donde se encuentra la casa rural Ornat-etxea, es un pequeño pueblo del valle de Roncal, típico pueblo pirenaico, asentado sobre la ladera de un monte y coronado por una imponente iglesia.

Guarda la entrada del pueblo la peña Lapitxorronga, una impresionante mole de piedra que amenaza con caer sobre el visitante.

Ya en el pueblo, paz y tranquilidad, para pasear por sus calles y observar sus casas de piedra olvidándose del mundanal ruido, visitar la iglesia y el cementerio, con varias estelas funerarias y uno de los pocos que todavía se mantienen pegado a la iglesia como antiguamente, o bien contemplar el pueblo en su totalidad desde la cima de la peña Lapitxorronga, atalaya natural.

También se pueden visitar una quesería que hay en el pueblo, Onkizu, donde se elabora el famoso “queso de Roncal”.

A escasos tres kilómetros de Vidángoz en dirección a Burgui, podemos visitar las cuevas de Azanzorea, un refugio de piedra al que se llega tras 30 minutos de agradable paseo por el bosque.

Para más información: www.vidangoz.com

 

Valle de Roncal

El valle de Roncal, al que pertenece Vidángoz, es uno de los valles más famosos de Navarra en lo que a su historia se refiere. De hecho, se dice que el primer rey de Navarra (bueno, en aquel momento Reino de Pamplona), el vascón Iñigo Arista, fue proclamado en este valle.

Pero, además de su historia, el valle de Roncal tiene otros muchos atractivos. Sus 7 pueblos (Burgui, Vidángoz, Garde, Roncal, Urzainqui, Isaba y Uztárroz), de calles empedradas y con típicas casas pirenaicas, señoriales, son un espectáculo para la vista. En varios de ellos hay museos (Museo de las almadías en Burgui; del tenor Julián Gayarre en Roncal; casa de la memoria en Isaba; del queso en Uztárroz) donde se puede conocer más sobre las formas de vida y la historia y costumbres del valle. En Burgui [en la imagen], “pueblo de los oficios”, pueden además observarse recreaciones de diversos oficios tradicionales.

Por último, reseñar también los atractivos naturales del valle de Roncal, que cuenta con diversas zonas protegidas, foces (gargantas), cuevas, simas, montañas… En definitiva, un valle de ensueño.

Para más información: www.vallederoncal.es

 

Valle de Salazar

El vecino valle de Salazar es, al igual que el de Roncal, otro típico valle pirenaico. Su historia, sus modos de vida y sus costumbres son similares a las de Roncal. Formado por 14 pueblos, la mayoría de ellos de pequeña entidad, es de reseñar por su belleza Ochagavía [en la imagen], con sus casas blasonadas, su puente medieval, su iglesia-fortaleza o su ermita de Muskilda. También en el valle de Salazar podemos encontrar otras peculiaridades, como el hórreo de Izal o las estelas funerarias de Igal.

Además de sus pueblos, el valle de Salazar también es un lugar donde disfrutar de la montaña, ya que en él se encuentra el primer dos mil de los Pirineos empezando por el Oeste, el pico de Orhi, o del esquí de fondo en invierno, en la sierra de Abodi.

Por último, señalar que el valle de Salazar es uno de los puntos de entrada a la Selva de Irati, una maravilla natural.

Para más información: www.valledesalazar.com